Las humedades son un problema que suele aparecer de manera habitual en las viviendas, pudiendo afectar a la resistencia estructural de las mismas y también a la salud de las personas que habitan en ellas.
Esto hace que sea sumamente importante identificar este tipo de problema rápidamente, así como su causa de la humedad, ya que esto nos permitirá buscar soluciones efectivas y así evitar que los daños puedan ser mayores el día de mañana.
Por eso, en este artículo vamos a enseñarte cuáles son los tipos de humedad más comunes, sus causas y también las posibles soluciones. De esta forma sabrás cómo actuar en caso de que aparezca alguna en tu vivienda el día de mañana.
En qué consiste una humedad
Cuando hablamos de humedades nos referimos a la acumulación de agua o de vapor de agua en algunos lugares como las paredes, los suelos o los techos de una vivienda. Esto puede afectar a la sensación térmica de la misma, además de favorecer la proliferación de moho o ácaros y, por supuesto, generar mal olor.
Además, si no se trata adecuadamente, la humedad puede dañar la estructura del edificio y provocar problemas graves como la aparición de grietas y el debilitamiento de las estructuras, lo que podría suponer un derrumbamiento el día de mañana.
Cómo saber qué tipo de humedad tengo
Debemos ser conscientes de que existen distintos tipos de humedades que provienen de causas distintas. Pero, en cualquier caso, la mejor forma de detectar cuál es el tipo de humedad que está afectando a nuestra vivienda, es contactar con una empresa que sea especialista en trabajos de impermeabilización.
En TRONER llevamos más de 35 años llevando a cabo impermeabilizaciones en todo tipo de superficies, por eso podemos ayudarte a detectar cuál es el problema que está afectando a tu vivienda para así solucionarlo rápidamente y que no te suponga un coste mayor el día de mañana.
Tipos de humedades en paredes y techos y soluciones
Es importante conocer la diferencia entre filtraciones, goteras y humedades. A veces puede surgir dudas y por ello a continuación nos centraremos exclusivamente en las humedades. Estas pueden tener distintas causas y vamos a ver cuáles son las más comunes, junto con sus posibles soluciones, a continuación.
Humedades por capilaridad
El primer tipo que vamos a conocer es la humedad por capilaridad, que es aquella que se produce porque la pared absorbe el agua del subsuelo, la cual asciende hasta llegar a una altura máxima de metro y medio.
Este tipo de humedades suelen aparecer cuando el nivel de agua del subsuelo es muy alto, como puede ocurrir en el caso de (jardines que se riegan a menudo, edificaciones situadas sobre acuíferos, etc. Y se reconocen fácilmente porque su patrón se inicia desde el suelo, al contrario de los otros tipos que vamos a ver.
Con respecto a su reparación, lo más recomendable es impermeabilizar la pared para que la humedad no continúe subiendo e incluso se pueden colocar sistemas de drenaje que permiten la evacuación del agua en exceso.
Humedades por filtraciones
Las humedades por filtración son aquellas que se producen por la entrada de agua del exterior hacia el interior a través de alguna grieta o fisura. Se pueden reconocer fácilmente porque producen una mancha húmeda y oscura en la zona en la cual se ubica la filtración, además de que pueden presentar mal olor con el tiempo.
Solucionar estas humedades es relativamente sencillo y conlleva detectar el punto por el cual entra el agua para repararlo y que así la zona afectada pueda secarse. Además, también habrá que revisar los canalones externos por si se pudiera estar produciendo alguna acumulación de agua que sea la que provoque estos problemas.
Humedades por condensación
Uno de los tipos de humedades que surgen de manera más habitualmente son las producidas por condensación. Estas se generan cuando hay un nivel de humedad muy elevado en el ambiente, el cual se condensa al chocar con superficies frías creando las gotas de agua que generan la humedad.
Se pueden reconocer porque empiezan con la formación de pequeñas gotas de agua en la superficie las cuales, con el paso del tiempo, terminando, dando lugar a las características manchas de humedad.
En lo referente a su solución, a pesar de parecer engorrosas, son las que pueden arreglarse de manera más sencilla, puesto que solamente implica usar un deshumidificador que acabe con el exceso de humedad del ambiente.
Humedades accidentales
Por último, también podemos encontrarnos con aquellas humedades que se producen de manera accidental por la rotura de alguna tubería, lo que hace que suelan aparecer en un punto en concreto y se expandan rápidamente.
La reparación de este tipo de humedades va a conllevar la localización de la propia fuga para así poder repararla y evitar que el flujo de agua siga corriendo. Además, en caso de que sea necesario, se tendrá que volver a pintar la zona una vez esta se haya secado correctamente.
Conclusiones
Las humedades son un problema sumamente común que puede darse por múltiples circunstancias y, conocerlas en profundidad, puede ayudarnos a detectarlas más fácilmente para así ponerles solución lo antes posible.
No obstante, si lo que quieres es prevenir este tipo de problemas, es necesario que tu vivienda disponga de una buena impermeabilización y en TRONER te ayudamos a lograrlo. Somos una empresa especialista en el cuidado de todo tipo de superficies con el objetivo de garantizar que resistan de la mejor forma posible el paso del tiempo. No lo dudes más y contacta con nosotros.
Por último, recuerda que si empiezas a ver los primeros síntomas de goteras en el techo o similar, es importante que contactes con un profesional, para que pueda valorar el estado del problema y ver cuál sería la mejor solución.
