El estuco es un compuesto ideal para exteriores que se forma mezclando cal, agua y arena, pero también puede contener yeso, cemento, arena de mármol y pigmentos naturales, dando como resultado paredes que transmiten muy diversas sensaciones en función de cómo se trate el estuco a la hora de aplicarlo. Pero antes de todo, lo importante para que el estuco en tu terraza sea un éxito es haber realizado previamente una buena impermeabilización. En TRONER S.L. somos expertos en impermeabilizar terrazas sin obras de albañilería, empalmes o juntas, ofrecemos, además, la seguridad de contar con hasta 10 años de garantía.
Las terrazas que cuentan con revestimientos de TRONER S.L. disponen de una solución de impermeabilización estanca, por las ventajas que proporciona la posibilidad de fabricar la membrana en el momento y en una sola pieza. A su vez, entregamos unos extraordinarios resultados en términos de aislamiento térmico. Además, hay que tener en cuenta que esta membrana proporciona un aislamiento total del edificio en caso de tormenta eléctrica.
¿Por qué revestir las paredes de tu terraza con estuco?
La aplicación de estuco en las paredes de tu terraza hace que esta luzca, como ya hemos avanzado, de diferente forma en función de cómo se trate. Los estucos más toscos transmiten sensación de muros inacabados con cierto aire histórico, muy apropiados para estas zonas exteriores, y no solo para decoraciones rústicas.
Asimismo, el estuco también denota sofisticación y lujo y puede utilizarse también en el techo de tu terraza o balcón. Esta otra corriente de inspiración es lo que ha convertido a este material es un must en la decoración de terrazas.
Más allá de lo puramente estético, el estuco sirve para reforzar las paredes y también sirve como barrera más superficial para que no penetre el moho o la humedad por su característica transpirable. Aunque como ya hemos mencionado, para esta finalidad lo mejor es realizar una correcta impermeabilización en la terraza.
Otra de sus fortalezas es que se trata de un material muy duro y que perdura en el tiempo muchos años, puede incluso cumplir 50 o 70 años si se cuida adecuadamente. Además, es fácil de mantener con una sencilla limpieza y es una solución de decoración económica.
Por último, señalar su capacidad de resistencia a las agresiones alcalinas. La alcalinidad se traduce en un polvo blanco que se desprende de las paredes y que en ocasiones depende del tipo de agua utilizado en la mezcla de pintura, y el estuco cuenta con capacidad para no verse afectado por ese polvito.
El truco del estuco en fachadas
Por último te traemos una serie de consejos para una correcta aplicación de este material. Recuerda que para tener un acabado perfecto de estuco en fachada hay que tener en cuenta 5 aspectos:
- La preparación previa de la pared: limpia, lija y lava la superficie para que quede totalmente lisa permitiendo así que el estuco se adhiera mejor.
- Aplica con la ayuda de un rodillo el líquido de unión de mampostería.
- Una vez seco el líquido, comienza con la aplicación del estuco de manera horizontal y vertical unas 3 o 4 veces.
- 24 horas después, moja toda la pared con agua.
- Pasar una lija para reducir las irregularidades.
