A la pregunta de si levantar las tejas es la única solución posible para rehabilitar e impermeabilizar nuestros tejados la respuesta es no. Con el paso del tiempo y a consecuencia de una climatología adversa las tejas que protegen y adornan los tejados de nuestras viviendas también se deterioran. Su instalación nos permite obtener como recompensa un tejado más estanco y a nivel estético, mucho más atractivo, pero cuando llueve y alguna de las tejas está rota, fuera de su sitio o su inclinación no es la adecuada corremos el riesgo de que el agua se cuele en la propia vivienda.
La teja mixta no es solo una teja de gran calidad, también una de las más comunes en nuestros tejados. Una mala colocación de las mismas puede originar una serie de problemas, provocando, como hemos señalado al principio, la entrada del agua de lluvia. Por este motivo, es importante fijarse en varios aspectos para asegurarnos de que no fallen:
– Su caída o inclinación
– Su fijación sobre rastreles
Si no se cumplen ninguno de los requisitos, es decir, la teja presenta una inclinación inadecuada o se encuentra descolgada, desde Troner lo que aconsejamos es la impermeabilización de los tejados. Es cierto que podemos retirar todas las tejas y volver a colocarlas pero, ¿y el tiempo que perderemos?
Si lo que quieres es garantizar la estanqueidad de los mismos, nuestros profesionales hacen hincapié en la necesidad de apostar por un sistema de impermeabilización más seguro que haga que la teja no se mueva. A diferencia de lo que hemos visto hasta ahora, este nuevo procedimiento nos permitirá fabricar un tejido de una sola pieza en el mismo momento de su ejecución, con la característica de que se adhiere fácilmente al soporte, por lo que no será necesario iniciar unas obras de albañilería.
Esta nueva técnica también se puede aplicar sobre un tejado de pizarra. A primera vista, este tipo de tejados nos ofrecen una cubierta sin relieve que hace más fácil la evacuación de la lluvia y la nieve. ¡Y qué decir de la belleza de la teja! Sin embargo, existe la posibilidad de que las tejas se despeguen a raíz de los procesos de oxidación originados por las inclemencias meteorológicas. Estas tejas, para que lo entiendas mejor, se fijan al tejado mediante una serie de ganchos que al oxidarse dejan de cumplir su función, que es la de sujetar la teja.
Para cambiar el gancho por uno nuevo habría que desmontar toda la superficie. ¿Has calculado todo lo que te costaría? Con este sistema, reforzado con fibra de vidrio y fabricación ‘in situ’, desde Troner lograremos que la pizarra quede debajo del revestimiento, evitando el deterioro de los ganchos.
Si no eres capaz de detectar las deficiencias de las que hemos hablado en este post, no dudes en ponerte en contacto con nuestros profesionales.